Serie – lo dios argentina –
El proyecto -lo dios-* nació sin saberlo en octubre del 2019 en Neuquén, Patagonia Argentina, cuando volvía de mi viaje a los Estados Unidos. Esta iba a ser una mudanza pero solo duró 9 meses; había partido muy conflictuada con mi familia e historia personal, y estaba siendo muy pesado seguir avanzando. De regreso a la Argentina volví a vivir a la casa familiar donde estaban mi madre y abuela materna; pocos meses después comenzó la pandemia quedándonos encerradas. Mi reacción fue un ataque de gastroenteritis teniendo que venir el servicio médico de emergencia en ambulancia a auxiliarme; este fue el inicio de un largo y profundo proceso de sanación personal genealógica.
Viéndonos las caras (la propia y las otras) a toda hora, los conflictos no tardaron en resurgir. Mi abuela con su deterioro cognitivo, mi madre con ataques de ansiedad, mi tristeza y la ira de fondo.
De Estados Unidos traje una Nikon D5600, con la que empecé a retratar estos “dramáticos” escenarios cotidianos: recovecos de la casa, mi madre enfermera, la cara de mi abuela donde sus gestos firmes y duros iban volviéndose suaves y nebulosos. Éramos tres espartanas con armaduras mentales deteriorándose, dejando lo más blando de nuestras emociones a flor de piel.
Al inicio la cámara fotográfica funcionó para distanciarme de mi contexto, una “fotógrafa lejana” que registraba situaciones. De estas fotos no quedan registros porque las borré, mi intención nunca fue mostrarlas sino “poder con” lo vivido.
Esta primera distancia luego me permitió el acercamiento, volviéndome una “fotógrafa par” que retrataba existencias (entes). Ahora me interesaba retratar la primera persona de la existencia que tenía al lado, darle lugar a su belleza, a su forma, a su relato “¿Cómo vive la vida?”. Mi mirada es con preguntas y las respuestas que busco no suelen ser con significantes.
Esto que comenzó como una estrategia de supervivencia intrafamiliar mutó en un proyecto artístico extrafamiliar y global. Trabajé como terapeuta muchos años y allí conocí mi fascinación por los relatos de vida, verdades simultáneamente opuestas que se unen en el relato común de “la Vida”. Retrato a los entes (existencias no solo humanas) buscando plasmar algo de su relato vital.
Volver a Neuquén me permitió conectar con “lo que me importa” del existir y es así que pude empezar a fotografiar, lo que veo me importa; llego a enamorarme fraternalmente de les retratades, algo de elles me convoca y lo siento en forma de amor. La fotografía se vuelve una práctica espiritual, sintiéndome en comunión con -lo dios-.
Mariangela Mussatti
*El uso de “lo” en este proyecto remite a un pronombre personal que trasciende lo personalizado, constituyendo más una potencia profundamente relacional.
**Las fotos que seleccioné para mostrar parten del año 2024.